La paciencia del Fútbol Club Barcelona en el fichaje de Alexis Sánchez se va agotando. A pesar del principio de acuerdo entre el club catalán y el Udinese, los italianos han ido subiendo sus pretensiones. El último problema reside en la forma de pago.
Tal y como cuento este domingo el diario MARCA, Rosell y los suyos prefieren fraccionar el pago durante los años que dure el contrato del chileno, mientras que el Udinese prefiere el dinero a tocateja.
Además, parece que Gianpaolo Pozzo tampoco ve con buenos ojos el sistema de incentivos que propone el Barça, en función de partidos jugados y títulos que pueda ganar el jugador. La semana que entra habrá una última reunión entre ambas partes.
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